Con orígenes italianos de la zona de la Puglia y la Lombardía, seguimos elaborando la pasta fresca y artesanal con el mismo tacto que lo hacía la nonna Vincenza.
Uno de sus diez hijos, Matteo Tranquillo junto con su mujer Montse Vidal, pusieron en marcha este proyecto hace casi 20 años. Actualmente su hijo Jordi sigue con la tradición familiar, incorporando al recetario del restaurante sus creaciones culinarias.